fanzine nº 17: monstruo
Puro desahogo
Apagada por dentro. Tiesa, como dicen los niños ahora. Tiesísima. Presa de una pena liviana pero consistente. Sólidamente apenada a distancia, en remoto, como si la realidad estuviera deshilachadamente, estalactíticamente apática. Como en un absurdo sobrante y a la vez consciente, incrustado en una capa distante del campo energético, digamos que monstruosamente fosilizada. El cuerpo lo sabe y tú lo sabes, pero te gusta olvidarte del asunto. Porque ese asunto del que no se habla sí te importa lo suficiente como para esconderlo. Ese asunto puede ser la relación con tu padre o el tamaño de tus pechos, puede ser tu amor propio o el tamaño de la decepción, puede ser tu niño interior ahogado en un charco.
por Susana Mensaque